Aunque no sea la de Garrick…..

de Miguel Ramos

.....“Sólo viendo a Garrick podréis curaros”. -¿A Garrick? -Sí, a Garrick… La más remisa y austera sociedad le busca ansiosa; todo aquel que lo ve muere de risa;
¡Tiene una gracia artística asombrosa! -¿Y a mí me hará reír? -¡Ah! sí, os lo juro; Él sí; nada más él; más… ¿qué os inquieta? -Así -dijo el enfermo-, no me curo:¡Yo soy Garrick!… Cambiadme la receta!!!!!

(Reír Llorando de Juan de Dios Peza)

…..Creí que la había perdido, y al ver la foto que tengo en mi escritorio la añoré,  una foto de un tiempo de risas, de burla , de armonía, un tiempo que ahí queda; La buscaba en los cajones, en las cajas, en las mochilas, en las repisas, en los libreros, en la recamara, en el carro, en, en la casa, en la oficina, en, en donde sea….pero, no, quizá siempre supe donde estaba y no me atreví a sacarla, me preocupaba perderla, me preocupaba romperla, es perfecta, tiene vida, tiene magia, es un carrusel que te envuelve y teje con sus colores la complicada y sencilla razón de hacerme reír de mi mismo, de mis penas, de mis temores , de mis carencias, de mis errores, de mis pesares y agonías manteniéndome ocupado, lo suficiente, si, para no disfrutar la vida. Siempre inconforme, siempre a la expectativa, siempre buscando no se qué,  que por cierto nunca he encontrado,  pero esta vez sí sabía que buscaba, casualmente y por un comentario, me enteré que justo se encontraba frente a mi vista sobre mi escritorio y se movió, el aire del ventilador, una vibración del piso, la imaginación, no sé, ni entiendo, ni quiero saber, solo sé que ahí estaba y la encontré, así que la tomé, todos quieren tomarse una foto con ella, todos dicen que solo a mí se me ocurre tenerla pero no importa.

Redonda, con vida, con magia, un pedazo de plástico aparentemente inerte me devolvió una de millones sonrisas perdida. Me la puse, me vi al espejo y pensé en Garrick, en su enfermedad, en los síntomas que le aquejaban  sufriendo un mal tan espantoso como la palidez del rostro que hacia resaltar el color fuerte de la nariz roja que afanoso me colocaba. Al interior de la pupila buscando la razón del porque  nada causa encanto, ni atractivo; del porque no importan ni nombre ni suerte; en un relativo letargo muriendo vivo, donde en momentos la única pasión es  muerte. Pero conseguí sonreír, levantar un poco el extremo superior de mi labio derecho, con solo usar un plástico rojo, con solo ver cubrir mi nariz sin advertir la tristeza de mis ojos…..Lo más sencillo siempre llenará lo más complejo y exigente. Lo más sencillo se bastará por sí solo para agradar y satisfacer. Decían que siempre vamos a la conquista de algo pero en ocasiones el conquistador se hace esclavo de su propia conquista, Alejandro Magno decía lo anterior, tenía tanto pero a la vez tan poco porque era prisionero de su grandeza y esclavo de la tierra sometida.

Quizá sea mejor que lo simple nos llene, después de todo no siempre lo sofisticado satisface el hambre…..de aquí hasta el tiempo que aprenda de nuevo a sonreír estará conmigo, qué bueno que encontré mi nariz de payaso…..aunque no sea la de Garrick al que todo el pueblo de Inglaterra creía el más gracioso de la tierra y más feliz…”